Diez sicarias literarias con una larga experiencia en el oficio y que son, curiosamente, hermanas, recibieron, hace algunos meses, un encargo al que no pudieron negarse: cada una de ellas debía perpetrar un asesinato literario, basado en experiencias propias o imaginadas.
Algunas de nuestras asesinas han sido delicadas, otras brutales, otras no lo lograron o lo lograron demasiado, algunas lo han hecho solas y algunas han montado un equipo pero sin embargo, sea como sea, todas han imaginado asesinatos: rituales, bestiales, imprevistos o torpes, actuales o del siglo pasado, en una casa rural, en el bosque, o en medio de un cementerio, por amor, por venganza, por justicia o por equivocación.
O sea que, lectoras y lectores queridos, ¡vigilad!
Las Germanes Quintana vuelven dispuestas a cargarse a quien se les ponga delante.