(Trad. Carlos Mayor)
Hay un camión de mudanzas aparcado frente al edificio donde vive Claudia. ¡Tiene vecino nuevo! ¿Qué cara tiene? ¿A qué se dedica? ¿Por qué vive solo? El enigmático vecino ha llegado con un cargamento de cajas de libros y Claudia se ha empeñado en descubrir quién es. Pero no le será fácil. El vecino parece que no está nunca en casa. Al cabo de una semana, lo único que sabe es que se comunica con póstits. ¿Cómo debe ser alguien que en tiempos de móviles todavía envía notitas de papel?
¡Una historia misteriosa de póstits que van y vienen por el rellano de la escalera!