Ya sabemos que la Feria de Frankfurt es la que crea mayores expectativas y más salivación libresca. Una vez allí el empacho de libros es monumental, pero son glotonerías que todos los bibliòmanos entendemos y compartimos. En la Buchmesse los empachos también son lingüísticos y al final argumentales: -¿pero al final la mata?; -No, no, muere de accidente; -Ah, y¿ él se escapa?; -No, no porque la quiere mucho. ¡Uf!
El año pasado Asterisc Agents acababa de nacer y no habíamos tenido tiempo de reservar mesa en el atiborrado Agents Center. Nos apoderamos de la mesa del bar (ver foto) y con estoicismo aguantamos muchas horas de pie. Este año naturalmente tenemos mesa, es la 8G. Si estáis por allí y os apatece hacer un alto, venid a vernos. Prometemos no hablaros de todas las joyas que llevamos en catálogo, pero de ninguna-ninguna... ¡ah! eso será imposible; no lo sabemos hacer.